solar térmica

Existen gran variedad de sistemas para aprovechar este tipo de energía, pero todos parten del mismo principio: captar energía solar para transformarla en calor, mediante un fluido que circula por el interior de los captadores solares. Sus componentes fundamentales son, el sistema de captación, sistema de acumulación, sistema de intercambio y sistema de regulación y control.

El sistema de captación está formado por uno o varios captadores solares conectados entre sí.

En el sistema de acumulación se almacena el agua caliente para su posterior utilización, ya sea para consumo directo de ACS o para aplicaciones de apoyo de calefacción.

El encargado de realizar la transferencia de la energía térmica captada desde el circuito de captadores al agua almacenada en el sistema de acumulación es el intercambiador.

Y por último, el sistema de regulación y control que se asegura el correcto y eficiente funcionamiento de todo el conjunto. Es este sistema el que activa el funcionamiento de la bomba de circulación que permite el intercambio de energía de los paneles solares al agua.

Para producción de aguas calientes sanitarias en viviendas, centros deportivos, centros educativos, hospitales, residencias, camping, hoteles, etc. También para la industria alimentaria, así como para climatización solar, calor, climatización de piscinas o apoyo a sistemas de calefacción.